Entrevista con Óscar de Alfonso, Gran Maestro de España.

Masonería Global converso con el Muy Respetable Gran Maestro de la Gran Logia de España, Óscar de Alfonso, quien nos dio su importante opinión sobre varios puntos de gran interés. A continuación la entrevista completa:

¿En su opinión qué papel ha jugado la Masonería en la historia de España?


El mismo que en el resto del mundo. Sin duda, la Masonería es una escuela iniciática que ha impulsado durante los últimos tres siglos a millones de seres humanos a actuar de acuerdo con su conciencia. En el seno de la Orden se conecta de forma muy profunda, a través del velo de los símbolos, con la condición humana. Todo masón comprende que su dignidad es idéntica a la de cualquier otro ser humano, por encima de las diferencias materiales que se den en el mundo, y defiende el derecho de todo individuo a ejercitar su pensamiento libremente y la obligación de tolerarnos en nuestras diferencias. Estos principios, que vertebraron el tránsito del Antiguo Régimen a la ciudadanía de las sociedades democráticas, están en el corazón de la Masonería y los masones de cada época los han impulsado sin descanso. También en España.

¿Cuáles son los principales retos de la Masonería Española en la actualidad?


Quizás el más relevante es la normalización de su relación con la sociedad española. Es difícil explicar esto en América, desde donde me entrevistan. Los principios de la Masonería, los masones, participaron en la fundación de prácticamente todos los países que nacieron en el XVIII y el XIX. Estados Unidos, Argentina, Venezuela, Chile, Colombia, Cuba… En todos esos países la Masonería es una institución que infunde respeto como un faro de los valores que han construido los horizontes morales de la modernidad. La Masonería ha sido perseguida en aquellos países que involucionaron. Esto fue especialmente cierto, en el caso de España, en el siglo XX. Durante la guerra civil, la condición de masón conllevaba la ejecución inmediata sin ningún tipo de proceso y durante la dictadura de Franco se crearon tribunales especiales para depurar totalmente el país de masones. Decía un célebre escritor español, Paco Umbral, que los masones fuimos los judíos de Franco. La democracia, que ampara y protege la existencia de la Masonería en España, no ha restaurado sin embargo el recuerdo de lo que somos.  

¿De qué forma puede la masonería contribuir al desarrollo ético, moral, humano y social de su país?


De la misma manera que lo ha hecho siempre: haciendo masones. Cada masón es un ser humano que desea conocerse a sí mismo, profundamente, y se compromete a ser fiel a los dictados de su conciencia. Cada masón tiene algo de Quijote en los caminos. Si ve un entuerto, su compromiso ético consigo mismo le obliga a intervenir.

¿Cuál cree que fue su mayor aporte a la orden en el ejercicio de su presidencia de la Confederación Masónica Interamericana?


Trate de dinamizar la vida de la institución lo que permitió que, en momentos muy concretos de la vida del continente, su voz serena fuese escuchada. Uno de los grandes retos de la Masonería como institución es ser capaz de proyectar la fuerza de sus valores y principios, como faro moral, y el continente americano tiene en la CMI una ventaja frente al resto del mundo. Debo añadir que mi elección para su presidencia hay que entenderla como un enorme regalo de reconocimiento internacional a la difícil historia de la Masonería Española que, frente a las Grandes Logias y Orientes regulares de América, es diminuta. Muchos masones recuerdan que el Grande Oriente Español en el exilio estuvo presente en la fundación de la Confederación en un tiempo donde ser masón en España conducía directamente a prisión.

Actualmente usted es Secretario Ejecutivo de la Conferencia Mundial de Grandes Logias Regulares ¿Desde su función en dicha organización, que gestiones o programas tiene pensados desarrollar?


La Conferencia Mundial es, sin duda, el lugar donde mejor puede percibirse la enorme diversidad de la vivencia masónica en el mundo pero, al mismo tiempo, la profunda unidad en sus esencias. Esta conferencia, que reúne cada 18 meses a las Grandes Logias y Orientes regulares del mundo con más de 50 tratados de reconocimiento, está llamada en el siglo XXI a ser el foro global en el que los masones de todo el mundo podamos intercambiar ideas acerca de los nuevos problemas que afrontan nuestras sociedades. En ese sentido, el reto es establecer mecanismos capaces de dar continuidad, entre conferencia y conferencia, a esos contactos y al desarrollo de las conclusiones.

¿Qué es la masonería regular y que la irregular?  


La Masonería regular es la corriente mayoritaria de la Masonería a la que pertenecen nueve de cada diez masones del mundo. La irregular es la corriente a la que pertenece el décimo. Antes hablábamos de la diversidad de la vivencia masónica regular, que puede verse, por ejemplo, en la multiplicidad de ritos existentes. Esa riqueza simbólica no nos separa. Nos hace más tolerantes hacia el otro. Sin embargo, en el siglo XIX, diversos hermanos decidieron eliminar el requisito de la espiritualidad a la hora de admitir nuevos miembros y eso motivó la fractura de la masonería en dos corrientes. La Masonería regular es profundamente espiritual. Sus miembros tienen una visión trascendente de la existencia. De algún modo, inauguró hace 300 años eso que hoy se llama diálogo interreligioso, donde seres humanos que practican religiones distintas hablan de los grandes valores que deberían construir la convivencia de los seres humanos. 

¿Platearía usted un rencuentro o reconocimiento mutuo entre estas dos corrientes?

 
La Masonería regular, que ha sido una fuerza constructora de la modernidad por su promoción del librepensamiento, la instrucción o la tolerancia, aporta un valor paradójico al siglo XXI: la espiritualidad, que concede a la dignidad humana un valor sagrado. El reconocimiento entre dos instituciones masónicas implica, esencialmente, derechos mutuos de visita de sus miembros. En ese sentido, el reconocimiento de una institución irregular por parte de la Gran Logia de España es implanteable. Eso no es incompatible con el hecho de que, para la Gran Logia de España, un ser humano que se inicia en una institución irregular es un masón. La prueba es que, si pide ingresar en nuestra institución, su iniciación no se repite. Sería absurdo…

Comments 3

  1. Seria oportuno que se entreviste a otros grandes maestros, como el de Venezuela donde existe una situación muy particular en la Orden por todos los problemas políticos, económicos y sociales. Si le interesa soy el Gran Canciller. TAF

  2. A Maçonaria Espanhola é um marco nos acontecimentos de nossa Ordem, com significativa contribuição a nossa evolução.

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